¡elige bien!
Una de las estrellas de la nueva carta. Juan Ozaki se demoró tres años en llegar a esta receta ocupando la técnica que usualmente se hace con los jamones, pero con pescado, los que han tenido de ocho a doce meses de maduración, para luego ser fileteados y para, posteriormente, ser impregnados con diversos insumos: sésamo y pisco, sutil y elegante; polvo de rocoto y leche de tigre, de leve picor y espíritu peruano; lomo saltado y polvo de cebolla, profundo y con una evocación carnívora; wasabi, que regala más sabor que picor; y el de salsa mentsuyu con hongos deshidratados, que queda con una impronta intensa.
TXT: Loreto Oda Marín. / FOTO: Constanza Larrondo ©2023-03