¡elige bien!
Un lugar estiloso donde las cervezas artesanales son las protagonistas
A comienzo de abril llegó a Orrego Luco, Providencia, la segunda sucursal de Krossbar, marca que hace prácticamente dos años se instaló en Bellavista. Este nuevo lugar sigue la onda de su antecesor, es decir, comparten la carta de comida y de bebestibles, además de tener ambos una decoración industrial, que pretende evocar a una cervecería.
Para quienes no la conocen, Kross es una de las marcas chilenas más conocidas de cervezas artesanales y propulsoras de crear una cultura en torno a eso. Por esta razón, si se trata de ese bebestible, acá se encuentran puros exponentes hechos de forma artesanal, ya sea de Kross, Chile o de otros países, como de USA, Alemania, Bélgica y España.
La lista es larga, pues hay más de 60 opciones, de las cuales el 10% se va renovando cada 3 meses. Además, ofrece dos cervezas invitadas, que están unos 10 días, y algunas series experimentales que van cambiando constantemente y que son publicadas en la pizarra detrás de la barra.
En este restobar hay un formato degustación de 130 cc y una tabla con seis vasos de diversas variedades en este pequeño formato. A la lista se suma coctelería clásica y a base de cerveza.
Para comer la oferta contempla unos 48 platos, los que cambian dos veces al año, misión de la que está a cargo de Álvaro Romero, como cocinero oficial, y de Matías Arteaga, como chef asesor.
La idea es ir incluyendo siempre varias preparaciones chilenas, con productos de muy buena calidad, algunos artesanales y otros que buscan ser puestos en valor. Tiene propuestas entretenidas y muchas para compartir, como la Oreja de Chancho Frita. También hay pizzas y sándwiches.
Este bar es un lugar ondero, acogedor y sabroso para pasar después de la oficina o reunirse con amigos. Igualmente, para ir solo, pues su barra invita a hacerlo, y existen mesas de seis para compartir con personas que no necesariamente se conocen.
Si bien, Krossbar está enfocado en los amantes de las cervezas, hay otras alternativas. En el lugar se suele ver personas de todas las edades, aunque el fuerte es gente joven. En definitiva, un buen punto de encuentro.
TXT: Loreto Oda M. / Mayo 2018.
Preparación fresca y profunda, que tiene un caldo con un toque de piure, pulpo, ulte, camarones y choritos de buen porte. Viene acompañado de pan para untar porque es inevitable. ¡Irresistible!
TXT y FOTO: Loreto Oda M. / 2019-12
Pulpo salteado y en su punto, que es acompañado de tomate cherry, cebollín, chips de camote y un puré de berenjenas al carbón que aporta una rica nota cítrica y ahumada... adictivo.
TXT y FOTO: Loreto Oda M. / 2019-12
Pizzas con una masa delgada, elástica y de justa crocancia, que está hecha con un 15% de orujo. La Chillaneja lleva, como bien lo dice su nombre, longanizas de Chillán, cebolla caramelizada, pimentón asado, champiñones y queso mozzarella.
TXT y FOTO: Loreto Oda M. / 2019-12
Lleva 50% vacuno y 50% prieta más rúcula, mostaza de la casa, mayonesa casera, una porción precisa de queso azul y unas peras asadas que quedan genial, pues aportan textura y dulzor, por lo que son un gran contrapunto. Todo esto, entre dos panes esponjosos y consistentes, acompañado de unas muy buenas papas fritas. ¡Uf!.
TXT y FOTO: Loreto Oda M. / 2019-12
Es el clásico Berlín, relleno con helado de vainilla, tocino crispy y salsa de chocolate caliente, siendo un juego de sabores y temperaturas. Ideal para terminar y ponerle la cuota dulce.
TXT y FOTO: Loreto Oda M. / 2019-12
